Menos maestros, más camareros

Gentes de trato

Publicado en La Voz de Galicia, sección Opinión, el 3 de julio de 2014

El dato que acabamos de conocer de reducción del paro registrado en más de 122.000 personas es, sin duda, positivo. Como también lo es el aumento de la afiliación a la Seguridad Social en unos nuevos 56.000 empleados. Son buenas cifras que confirman una tendencia favorable, ya por quinto mes consecutivo, que nos dan un pequeño respiro en medio de un escenario irrespirable e indecente de la España de 4,5 millones de parados. La misma lectura nacional podríamos hacerla para Galicia, con la salvedad que el número de parados se redujo un 4,2% en lugar del 2,6% nacional, dejando la cifra por encima de los 252.000 desempleados.  

El análisis pormenorizado de los datos ya no nos deja tan satisfechos. La afiliación a la Seguridad Social ha sido mayoritariamente con contratos a tiempo parcial (ya lo son el 35% de los afiliados), y por tanto con salarios menores y bases de cotización también menores. Más afiliados y menos ingresos, con lo que las cuentas del sistema no han permitido todavía hacer frente a los pagos de las prestaciones sin echar mano de los fondos de reserva. Obviamente, si esto no se corrigiera, peligraría la sostenibilidad del sistema a medio/largo plazo. Por otra parte el empleo generado ha vuelto a ser mayoritariamente en los sectores de hostelería, comercio y servicios vinculados al turismo, siendo prácticamente plano en la industria y negativo en educación. Más camareros, limpiadores, recepcionistas de hotel, azafatas y dependientes de comercio en un país que cada vez tiene menos maestros, médicos, y trabajadores del sector industrial. Y con unos salarios que no les alejan del umbral de la pobreza, que no permiten sanear los ingresos por cotizaciones a la Seguridad Social y mucho menos tener renta disponible para reactivar el consumo interno. 

Es necesario que esta tendencia se consolide en el segundo semestre, que la calidad de la contratación y los salarios mejore, y que la reforma fiscal no sea tan timorata con los autónomos y asalariados.